Espero con esta
declaración mis queridísimas amistades y conocidos sepan que estas acciones me
dan fastidio. Por respeto muchas veces callo, las indirectas por años no me han
servido hasta que encontré un lugar en donde puedo expresarme libremente. Hagan
memoria, ¿compartieron estas situaciones
conmigo? ¿Fue de mi parte o fue de la suya?
1) “¿Me invitas tu bebida?”; no les ha pasado un día en el cual su garganta estaba
cansada porque había sido expuesta a mucha vocalización. Sea en una exposición,
charlas de horas con los amigos, agitación por el arduo trabajo en el gimnasio,
etc. Sedientos resultan y deciden comprar
agua mineral o gaseosa, de repente, se acerca uno de tus amigos
lanzándote la pregunta aterradora para tu pobre garganta: “¿Me invitas tu agua/gaseosa?” Piensas: <Seguramente tiene un vaso descartable>; de pronto te dice: “De la botella nomás, no te preocupes” y
en mi interior siento y pienso <
¿Hablas en serio? >.
Para
salir de esta situación se necesita ser practicos y saber renunciar: “Okay, te
dejo mejor. Porque ya he bebido suficiente”. < Perdón, pero YO…> ¡NO COMPARTO SALIVAS!.
2)
“¿Deseas?,
No gracias… ¿Puedo probar un poquito?”; mi mamá desde pequeña me transmitió
el valor de la solidaridad cuando mis amigas visitaban mi casa. Ella me enseñó
a deducir las indirectas de mis compañeras: “Ya van a ser las seis de la tarde, tengo que ir a tomar el lonche con
mi abuelita”. Entonces, aprendí a ser solidaria con sus intestinos,
seguramente en su estómago estos causaban tremenda revolución generando ansiedad y hambre. Complacía sus
antojos, terminábamos compartiendo entretenidas y largas pláticas.
Hace
dos semanas ocurrió algo con mi mejor amiga, se había quedado a dormir en mi
casa. Al día siguiente, continuaba aún por la tarde, empecé a preparar el
lonche y recuerdo preguntarle: “¿Deseas
huevo frito?” me respondió: “No,
gracias”. Ella observaba de reojo el plato y al poco tiempo empezó a picar.
Por
fuera disimulé, por dentro intentaba tranquilizarme no podía porque una voz me
repetía: ¡TE CONTRADICES MAL!.
3) “¿Me veo bien? Seré la SENSACIÓN” ese tipo de
preguntas no me deben hacer ¡POR DIOS!.
Sé que todos deseamos vernos bien no
discuto la vanidad que tenemos por dentro y en el espejo algunos se alucinan un
Antonio Banderas o Cristiano Ronaldo promocionando sus perfumes o shampoo. En
el caso de nosotras las chicas, imitan la mirada sexy de Megan Fox, se muerden
los labios a lo Angelina Jolie o se miran la cola pidiendo tenerla a lo J.LO.
Pero el EGOCENTRISMO al máximo llega hasta darme pena. Explico el ¿POR QUÉ? no deben hacerme esta
interrogación los ALUCINATORS; Si alguien
te piropea es porque te haz producido muy bien. Sin embargo, cuando haces este
enunciado estás practicamente obligando a la persona que te halague. ¡ME ESTRESAS! LO IMPORTANTE ES QUE ESTÁS SANO ¿NO CREES?.
4) “¿Me prestas tu celular?”, he tenido cuatro
celulares: Sony Ericsson (2), Motorola V3, TV-Pro7, actualmente un Blackberry (él único salvado hasta el momento de caer
en manos de curiosos) y han sido víctimas de espionaje no por el FBI sino
por ACDC (Amigos Chismosos De Celulares). Te dicen: “Ay qué bonito, ¿me prestas por favor?”.
Crees
en lo atractivo que se ve tu móvil y decides mostrarles, tal es la confianza poniendo
en sus manos el aparato tecnológico con la finalidad de que exploren las
opciones. Justo está entrando una llamada y te devuelven, apenas terminas de
hablar te das cuenta que estaban en tu bandeja de entrada. Inmediatamente te
dan ganas de decir: ¡NO JODAN CHISMOSOS!.
5)
“Te haces el rockerísimo y en tu reproductor tienes un arroz con mango
de canciones”. Esto va para los llamados POSEROS, se
creen los chicos malos, los misteriosos, interesantes. Su protesta es un
llamado de atención para querer causar impacto en los demás.
Dicen
escuchar sólo ROCK y lo peor es cuando se toman fotos haciendo la señal lml
para subirlas en sus preferidas redes sociales, alucinándose un Kurt Cobain,
Matt Bellamy, Thom Yorke .
De pronto, un día le preguntas: <¿Qué bandas son tus favoritas?> te responden: “Simple Plan,
Good Charlotte, Maroon 5”, <¿Te
gustan los Beatles, Stone Roses, The Doors, Janis Joplin, Oasis?> “No
brother, esos son pasados de moda”.
No
tengo nada en contra de escuchar todo tipo de música, lo que incomóda son las
apariencias y no aceptarse como son. “¡You’re
BEAUTIFUL no matter what the say!”.
6) “Me dijo que dijiste”, si te contaron algo debes
guardarlo por más intensa que pueda ser la información, tu prometiste no
divulgar esos datos, cuando dijiste: “Mi
boca es una Tumba”. Pasan unos días, semanas, meses:
P1:
“Me dijo que dijiste”…
P2: <¿Cuándo? ¿Por qué te ha dicho eso?>
Ahora,
si jamás hiciste un comentario de esta magnitud y se produce un chisme sin
fundamento porque resulta ser el rico
alimento y divertido hobby para los que no tienen nada por hacer, aunque en
realidad si hacen algo ¡FREGAR LA VIDA
AJENA!. No hagas caso y diles:
<¡Habla con mi Mano!>.
7)
“Ya es tarde, ya me voy…Uy me pasé la hora, ahora sí ya me voy” Simple, sencillo, no me gusta convivir mucho tiempo con una persona por
más amiga, familiar que sea. Creo que puedo soportar a lo mucho 5 ó 6 horas su
presencia, tiendo aburrirme muy pronto, las visitas en otros países a las
justas llegan a durar 1 hora pero en el Perú das la mano y se van hasta el
codo. ¡NO ME ODIEN, SOY “LA RARA”!.
8) “En mi casa…en tal restaurante…en
el Mall…en casa de…” Apareció Facebook hace años, la gente inició a divertirse con esta
famosa red social, recuerdo que cree mi perfil por los juegos. En clase de
Marketing veía a mis compañeras jugando a vestir, dar de comer, bañar las
mascotitas de PET SOCIETY.
Se
aplicó en mí el popular dicho “La
curiosidad mató al gato”, entonces empecé a jugar. Luego me aburrí, pero
cuando actualizaba en Inicio aparecían tantos comentarios, al principio normal
e interesante. Cuando Facebook permite a los móviles tener su aplicación, vino
la desdicha.
Sinceramente
QUÉ FASTIDIO leer cada minuto los sitios dónde están, como: “En mi casa,
escuchando música” “En mi casa, tomando chocolatito caliente” “En casa de
Carolina viendo la Tv” “En el restaurante El Mochica comiendo Pato, Cabrito,
Cuy” “En el Mall paseando con mis amigas”
Me pregunto, si algún día tendré la
osadía de burlarme de muchos y colocar en mi estado: <En el baño…¡CAGANDO!>.
9) “Ni ser Santa ni ser Puta”, creo en los
cambios como también creo en la doble cara. Muchos dicen que las chicas “Santa”
resultan ser las más terribles, mientras las chicas “Puta” son las más
sensibles. Conocí a una chica coqueta, amiguera en la Universidad, la mayoría tiene
la osadía de juzgarla, ni siquiera ven sus vidas y creen tener ese derecho.
Jamás
olvidaré cuando dijo una vez: “Yo no sé
para qué estoy aquí, si al final conseguiré un marido con plata y me
mantendrá”. Llegó a dejar un ciclo, imaginé que fue en busca de su “marido con plata”, me equivoqué porque
retornó y ahora es otra. Aparentemente más dedicada a los estudios según lo que
pública en su muro de Facebook. Pero eso sí jamás dejará su gusto por llamar la atención.
Sé
que no debo juzgar pero me disgusta cuando se jactan de sus dichosos cambios,
en efecto, si está siendo sincera ¡GENIAL!
Si está siendo doble cara ¡QUÉ BUENA
JUGADORA ERES!.
10) “¡Sube, Sube! ¡Oye pero está lleno!” La Combi,
el Micro son los vehículos encargados de transportar a las personas a sus
centros de labores, hogares, etc. Por más auto que tengan ¿Quién no ha estado en una Combi o en un Micro?, lo curioso son las
cosas que ocurren dentro de ellos, gente que despertó ese día de mal humor y se
desquitan con los cobradores, pero lo peor son aquellos olores extraños y
desagradables producto de la transpiración en los individuos.
A
veces aplico la técnica de Aristóteles el padre de “La Lógica”: <O LA GENTE ES SUCIA O YO SOY LA ASQUEROSA>.